¿Cómo definir un objetivo profesional?

Ya hablamos de cómo ir hacia tus objetivos profesionales, pero vamos a actualizar un poco más esta información de forma más sistematizada.

Inicio y diferencia de conceptos.

¿Es lo mismo un perfil que un objetivo profesional?

En ocasiones suele confundirse el perfil con el objetivo cuando podríamos definir el perfil profesional como nuestra situación profesional actual y el objetivo profesional con la situación profesional deseada.

En definitiva, el perfil es quién soy (a nivel profesional) y el objetivo es quién quiero ser de mayor (al menos de forma aspiracional, no siempre se llega o se producen cambios mucho más interesantes en la carrera profesional, ojo con obsesionarse).

Factores que definen un perfil y factores que definen un objetivo.

En esta cuestión podemos ver que hay factores que ambos conceptos comparten y que posteriormente iremos ampliando.

¿Cuáles son los factores que componen un perfil profesional?

Veamos con más detalle estos factores:

Experiencia. (qué soy, qué he hecho, durante cuánto tiempo)

El primer factor es fácil, tenemos que definir nuestra experiencia en base a tres parámetros: puesto, funciones realizadas y tiempo de ejecución.

Si no tienes experiencia este análisis puede hacerse con otro tipo de experiencia no remuneradas, voluntariados, colaboraciones en negocios familiares, pertenencia a actividades deportivas, hobbies, todo conforma parte de tu perfil.

Conocimientos (formación adquirida).

Es el apartado que podríamos definir como más «objetivo», debemos listar de forma exhaustiva toda nuestra:

• Formación reglada adquirida
• Formación complementaria adquirida (certificaciones, especializaciones…)
• Competencia lingüística (adquirida y real)
• Competencias digitales (software manejado)

Conforme vayamos avanzando en nuestra carrera muchas se volverán obsoletas y de poco valor.

Competencias.

¿Qué habilidades blandas tengo? No hablamos de competencias técnicas sino de aquellas habilidades que he desarrollado, para ello puede ayudarme:

• Hacer un listado de las actividades que más me gusta hacer
• Actividades en las que destaco y/o me siento cómoda/o
• En qué actividades necesito ayuda
• Qué actividades no me gusta hacer o suponen un «disconfort»…

También una visión externa puede ayudarte, no siempre somos objetivos evaluándonos. Un ejercicio que funciona muy bien es solicitar a tres personas de ámbitos distintos (familia, amigos, trabajo/estudios) tres competencias en las que destacas y tres competencias en las que debes mejorar. Será un ejercicio muy clarificador y te ayudará a construir la imagen que proyectas en los demás (el constructivismo que hace estragos).

Características del trabajo (que tengo).

Listar todas las variables que pueden afectar a tu trabajo actual: sector, salario, compensaciones adicionales, horario, ambiente, modelo de trabajo (flexible, híbrido, presencial), opciones de desarrollo, ubicación,…

No olvides marcar en cada caso las líneas rojas que quieres, a priori, no volver a repetir. Sé honesta/o.

Intereses.

Más allá del trabajo hay valores que están presentes en tu vida y que son difíciles de obviar (sí, ya sé que si una/o tiene que trabajar esto queda en un segundo plano, eso que hablo siempre de la orientación A, lo que quiero ser, la orientación B, la orientación que me da de comer mientras me dirijo «A») pero si eres un animalista convencido será difícil que trabajes en una empresa que elabora armas de caza.

Aquí tus hobbies pueden ser fundamentales para orientarte y conocerte un poco mejor.

¿Cuáles son los factores que componen objetivo profesional?

Experiencia.

Si en el apartado de experiencia en el perfil profesional hemos hablado del/os puesto/s que hemos desempeñado en este apartado vamos a definir nuestro puesto ideal, bienvenida/o a la carta de los Reyes Mago.

¿Cómo puedo hacerlo sin «autoengañarme»? (todas/os sabemos que por pedir que no quede y luego los reyes traen lo que traen) Una buena práctica puede ser visitar ofertas o vacantes de puestos deseado y listar las funciones que requieren. ¿Por qué? Porque nos servirá como un une con flechas para saber en qué tareas tengo que adquirir mayor experiencia y cuáles ya están en mi bagaje actual.

Conocimientos.

Como hemos dividido en cuatro áreas clave en torno a nuestro perfil actual, nuestro objetivo tiene que ir en completar esas cuatro áreas con lo que requiere nuestro/s puesto/s ideal/es. Qué formación, especializaciones, certificaciones, idiomas y/o competencias digitales se requieren para conseguir la posición deseada.

Competencias.

De mis competencias definidas, cuáles se correlacionan con las posiciones y objetivos profesionales que deseo alcanzar. Por ejemplo, si una de las competencias más demandadas es la gestión de equipos, trabajo en remoto o híbridos, con poca interacción o mucha autonomía no ayudarán a su adquisición.

Características del trabajo.

Puede que te cueste definirlo pero quizás este test pueda ayudarte a disipar todas tus dudas. Aquí debemos hacer una doble columna, que nos indique el hueco o diferencia entre lo que hemos marcado como deseado y lo que el mercado nos ofrece. Esto nos ayudará a obtener una visión más realista entre lo que yo quiero y lo que el trabajo ofrece y reajustar nuestro objetivo. Sin olvidar las líneas rojas que hemos marcado en nuestras posiciones actual.

Sectores.

En línea con lo anterior mis intereses me proporcionarán una serie de valores con los que alinear a los valores de sector y/o empresas objetivo. Vuelvo a repetir, orientación A vs orientación B.

Durante el proceso de transición

Medir.

De nada sirve hacer este análisis si no mido, o no establezco tiempos. Una vez que tengo claro hacia dónde ir tenemos que definir los tiempos o acciones para adquirir los requisitos de nuestro puesto deseado.

Cambiar y revisar.

Entre la carta a los Reyes Magos y la cruda realidad hay un techo, será conveniente que trabajes la competencias de adaptación y resiliencia. Seguramente tu objetivo se asemeje a lo deseado pero no siempre, o rara vez, cumplirá todos tus requerimientos. Por eso es conveniente, revisar mis creencias con la experiencia que me arroja el proceso de transición.

¿Lista/o para encaminar tus pasos a tu objetivo profesional?